Chatbots personalizados basados en tecnologías como ChatGPT, que están apareciendo en el mercado, incluso con su capacidad para "hablar" con los muertos.
Hacer que ChatGPT esté disponible para el público fue uno de los avances tecnológicos más notorios de las últimas décadas, una forma de facilitar la vida de los clientes y un impulso para sus entornos profesionales o incluso educativos.
No hay duda de que si continúa mejorando, ChatGPT y similares pueden convertirse en una herramienta muy poderosa, pero también igualmente peligrosa o que choca directamente con la ética.
Incluso ChatGPT está haciendo posible resucitar digitalmente a los muertos. Esta es una nueva fiebre para los chatbots personalizados, esta vez con datos de las huellas dactilares de los difuntos.
Esto forma parte de un programa llamado Proyecto December, que permite a los usuarios interesados ingresar información sobre una persona fallecida y así crear un chatbot personalizado basado en ChatGPT y tecnologías similares.
Algunos expertos como Leah Henrickson, profesora de medios y culturas digitales en la Universidad de Queensland, dicen que los tanabots podrían volverse más frecuentes en las próximas décadas a medida que más personas mueran, personas que dejaron una gran huella digital.
Esto podría unirse a la fiebre que ha existido durante cientos de años de intentar comunicarse con los muertos, y ChatGPT podría ofrecer una visión diferente de ese concepto.
Las desventajas de los tanabots
La primera desventaja es ética: hasta qué punto alguien debería tener derecho a usar la huella dactilar de una persona fallecida al personalizar un chatbot.Esto podría causar una multitud de disputas legales entre familiares, entre aquellos que están de acuerdo y aquellos que no lo están, además de provocar la extraña sensación de que una máquina podría estar "interpretando" la personalidad de alguien fallecido.
También se debe tener en cuenta que estos chatbots personalizados, en este caso, con la huella dactilar de alguien fallecido, expondrían una supuesta personalidad de esa persona basada en su presencia en línea creada a lo largo de su vida.
Como se sabe, la huella dactilar de una persona no siempre coincide con su personalidad real, por lo que tal vez estarían ofreciendo una personalidad incorrecta en relación a cómo era realmente esa persona en su vida real.
Además, habría personas que podrían obsesionarse con este tipo de chatbot creyendo que un difunto les está hablando realmente desde el más allá, engañándose a sí mismos e incluso generándose más desesperación y dolor.
Etiquetas: ChatGPTMuertosdigitalmenteayudandoresucitar